miércoles, 31 de julio de 2013

“El diablo” saldrá en Barcelona


“El diablo” saldrá en Barcelona 


He amado y he sido amado. He llegado, como resultado del amor, varias veces al matrimonio. Igual he llegado, debido a avatares abrumantes, también a su ruptura.
Al estar convencido de que todo caballero debe tener mala memoria, nunca había querido escribir una pieza en la cual el matrimonio y el divorcio, fuesen la temática central. 

Reiteradamente he dicho que no quisiera herir jamás las exquisitas sensibilidades de las amadas, ni con pétalos de lavanda, flor de espliego. Algo que, en medio de tantas pasiones, quereres y desamores que transitan desde matrimonio a la ruptura, es sometido a complejas tentaciones.

La decisión que, hasta que escribí la nueva obra: “El diablo ya no vive aquí”, he sostenido, trataba de evitar que se hicieran referencias maliciosas o sacaran de contesto determinadas situaciones, las cuales, inevitablemente, aparecerían en una obra con el tipo de tema señalado. Persigo con la dramaturgia un bien mayor, que nunca conciliaría con mis particularidades vivenciales.

No obstante, una noche —preferido momento de escritores y vampiros— me chantajee a mi mismo planteándome el razonamiento de que en un profesional de la creación literaria, la libertad temática es una condición insoslayable. Partiendo de estos postulados escribí esta obra teatral. Se trata de una pieza con dos diferentes finales.  Debo confesar que la idea no es del todo original. Ya León Tolstoi, utilizó dos disímiles finales en su novela corta “El Diablo”, escrita en 1889. 

Razones puramente circunstanciales, y no literarias, impulsaron a Tolstoi a escribir los dos finales aludidos. A mí, desde la primera lectura de aquella breve novela, me pareció interesantísimo el hecho, casi fortuito, que cuento.
En el caso de esta obra sus dos únicos personajes, María Cristina y Mario Ernesto, tenían derecho a un desenlace particular. Dada la situación del matrimonio en punto de quiebra que presenta esta pieza (de enriquecido humor ácido y negro), me resultó imposible conciliar un final común que satisficiera a los perfiles conductuales de los dos antagonistas mari-teatrales.

El asunto es que el trabajo del dramaturgo, en este caso, ha concluido. Ahora ocurre que en el mes de octubre de este mismo año, La Teatrería presentará en el Teatro del Raval, de Barcelona, “El diablo ya no vive aquí”. Será su estreno mundial. 

La responsabilidad de la interpretación recaerá sobre los actores barceloneses y maestros teatrales, Alex Mas Marsiñach y Tania Alor Soto. Serán asistidos por los consagrados artistas del Teatro, German Madrid y Antonia Castillo (de la compañía Carro de Baco, ya presentada en nuestro país.)

 Por supuesto que pienso estar cuando hagan el estreno mundial de El diablo ya no vive aquí. Estaré ahí hasta que caiga el… ¡Telón!

lunes, 29 de julio de 2013

El chisme de las musas: ¿Erán tres, cuatro, siete, nueve o diez?


 El chisme de las musas: 
¿eran tres, cuatro, siete, nueve o diez?


El término “musa” proviene del griego antiguo μοῦσαι (mousai). Los primeros aportes a su leyenda nos los da el historiador griego Pausanias.

Originalmente era tres:
Ciertamente los griegos nos hablan, primero, de tres musas: Meletea, de la meditación; Mnemea, de la memoria y Aedea, del canto.

En Delfos eran otras:
En Delfos originalmente también eran tres; pero sus nombres coinciden con las cuerdas de la lira de Orfeo: Nete, Mese e Hípate. También fueron nombradas como: Cefiso, Apolonis y Boristenis.


 Siete musas:
Luego, algunos escritores griegos comienzan a hablar de siete musas o ninfas, ya que habitaban en las fuentes: Neilo, Tritone, Asopo, Heptapora, Achelois, Tipoplo y Rhodia.

Cuatro musas hijas de Zeuz y Plusia:
Se supone que estas cuatro eran: Telxinoe, Aede, Arje y Meletea.

¿Finalmente nueve?
Luego establecen que las musas eran nueve diosas menores, hijas de Zeuz y Mnemósine (diosa de la memoria.), que tenían a cargo amenizar con sus cantos y danzas los banquetes de los dioses del Olimpo; dirigidas por Apolo (dios del fuego solar y de la belleza, de las artes plásticas, la música y la poesía), cerca de las fuentes del Parnaso. Algunas veces descendían a la Tierra y actúan de mediadoras entre lo divino y lo humano, proporcionando inspiración a los artistas.

Homero, efectivamente, cita este número, pero nunca mencionó sus nombres. El primero en nombrar a las nueve fue Hesíodo:


Calíope (Καλλιόπη), la de la bella voz: 
               Musa de la elocuencia y de la poesía épica. Sus diferentes representaciones  
               artísticas  son una corona de laureles, un libro, una tablilla, un estilete y una  
               trompeta.

Clío (Κλειώ), la que celebra:
              Es la musa de la historia. Sus diferentes representaciones artísticas son una   
              corona de  laureles, un libro o un pergamino, una tablilla, un estilete y un cisne.

Erato (Ἐρατώ), la amorosa:
             Es la musa del arte lírico de la elegía. Sus representaciones artísticas con una lira, 
             una viola y un cisne.

Euterpe (Ευτέρπη), la del deleite:
            fascina con el hechizo de la Música a hombres y animales, musa de la música

Melpómene (Μελπομένη), la del cantar:
           habla del sufrimiento y de la muerte, temas fundamentales del Teatro de la Tragedia.

Polimnia (Πολυμνία), la de muchos himnos:
           inspira a los poetas que se acompañan de la lira y preside la Poesía Lírica.

Talía (θάλλεω), la del florecer:
           se burla de todas las cosas, es la musa de la Comedia.

Terpsícore (Τερψιχόρη), la del deleite de la danza:
          se consagra a los ritmos de la Danza.

Urania (Ουρανία), la celestial:
          es la musa de la Astronomía, canta la armonía de los astros.

El museo era originariamente el templo de las musas, que se alzaba sobre una de las colinas de Atenas. El término música designaba en un principio al conjunto de las artes presididas por las musas.

Safo de Lesbos, la décima musa:


Algunos escritores griegos clásicos colocaron a la poeta Safo de Lesbos como la décima musa. Pero ésto fue, más que otra casa, un reconocimiento a sus inmensos talentos, belleza y aportes literarios. Safo llegó a  ser colocada entre los Nueve Poetas Líricos Griegos. Se acepta que Safo y Alceo fueron los más destacados poetas líricos de la Grecia Clásica.


En mi sueño cerca se me aparece
tu graciosa imagen, sagrada Hera,
la que los ilustres reyes Atridas
vieron con ruegos;

pues llegado el fin de la empresa de Ares,
junto al Escamandro voraginoso,
no pudieron ir desde aquí sus naves
hasta su casa

sin hacer ofrendas a ti y a Zeus
y al amable dios que engendró Tiona.
Sacrificios puros te ofrece el pueblo
hoy como entonces:

las doncellas traen un hermoso peplo
y a tu altar se agrupa junto con ellas
la apretada fila de las mujeres...

¡Telón!

jueves, 18 de julio de 2013

Dos reseñas "Del palenque a la escena"

Dos reseñas "Del palenque a la escena":
en Karpa y Luna Teatral 






Karpa es una revista académica electrónica gratuita de crítica teatral y cultural latinoamericana, dirigida por Gastón Alzate y Paola Marin: Es editada en California State University, Los Angeles, Estados Unidos. Dicha revista se dedica a investigar los diferentes aspectos y visiones de la cultura Hispanoamericana e Ibérica en manifestaciones como el cabaret político, la performance, el teatro, las acciones artísticas, las intervenciones callejeras, el grafiti, la fotografía y el cine, incluyendo los varios aspectos de las teatralidades inferidas en las prácticas sociales.

En su más reciente número han publicado una reseña sobre antología Del palenque a la escena: antología crítica afrolatinoamericano que la Universidad de Colombia, con la colaboración de un conjunto de universidades e instituciones, ha editado. (http://www.calstatela.edu/misc/karpa//KARPA6.1/Site%20Folder/KARPA6.1.html)





La reseña de marras (que incluyo al final de esta entrega) podría ilustrarnos sobre el nivel que tiene esta antología en la cual han incluido mi pieza teatral "Amanda" (Premio Casa del Escritor Dominicano 1992), con una introducción crítica de Carlos Esteban Deive (Premio Nacional de Literatura)

En Luna Teatral (de Argentina) también han publicada una amplia reseña de la antología que he citado. Allí comentan el voluminoso libro (782 páginas) y hacen una reseña sobre cada uno de los autores y de las obras publicadas.

He copiado lo que en Luna Teatral reseñaron sobre la histórica "Amanda", incluida junto a otras excepcionales piezas teatrales, en Del palenque a la escena: antología crítica afrolatinoamericano.

El decimocuarto texto de este recorrido Afrolatinoamericano pertenece a la República Dominicana, Amanda de Giovanny Cruz Durán y es precedido por el trabajo de Carlos Esteban Deive, quien comenta que “es una obra profundamente trágica, y lo es porque lo sobrenatural domina la acción” (697). Acción que se intensifica, en el texto dramático, a partir de las imágenes sonoras, en especial, y también de las imágenes visuales: “Música de atabales. El baile llega a su climax.”(708). La melodía y la danza, en momentos sensual pero en otros violenta, tienen independencia más allá del discurso verbal y dejar claro que el vudú no es brujería, que el cuerpo no pecaminoso como lo propone la Iglesia:

AMANDA.- […] Amanda Eloísa Mercedes nació para bailar. Por eso, si ahora mismo vuelves a ponerme a elegir entre el atabal y tú… te repetiría nuevamente: ¡Me quedo con el atabal!
El negro ANTONIO, vestido de blanco, toca su atabal sobre una tarima […]
AMANDA.- ¡Suéname ese atabal, Antonio! ¡Que se te hinchen las manos! ¡Dale fuerte a ese atabal, maldito negro! ¡Haz que sufra de dolor el cuero tenso del chivo! ¡Demuéstrale al orgulloso palo que eres tú su amo! […] (739)

Cruz Durán logra un canevas vivencial, tejido por las creencias ancestrales y la cotidianidad, ni Amanda ni Antonio están poseídos solo tiene el regalo de la vida en la música y la danza, con el orgullo de sus raíces afro.
Concluyo ahora con la reseña incluida en el último número de Karpa:

(http://www.calstatela.edu/misc/karpa/Karpa6.2/Site%20Folder/mamercedes.html)




Les aseguro que tener en vuestras bibliotecas un ejemplar de este libro constituye un verdadero lujo literario.





miércoles, 17 de julio de 2013

Conflictos por la herencia de Freddy Beras


 Conflictos por la herencia de Freddy Beras


Hoy salió, finalmente, a la luz pública el conflicto que tienen, lamentablemente, los herederos de Freddy Beras Goico. Acento.com lo acaba de subir a su servidor digital.

El tema es de mi interés porque es harto sabido mi relación laboral (diez años trabajando en “El Gordo de la Semana”) y amistosa (más de 30 años) con el nunca suficientemente admirado Freddy Beras.

Estoy seguro de que si efectivamente hubiese alguna chispa  de conciencia entre aquellos que mueren, Freddy debe estar llorando en su tumba por el derrotero que ha tomado el asunto de su herencia.

Según plantean tres de sus hijos (Freddyn, Ernestico y Deyanara), ellos han agotado todos los recursos de persuasión, durante dos años, para evitar llegar a los tribunales de la República, como indefectiblemente ha ocurrido. ¡Una lástima!

Recuerdo que varios de nosotros (Quiñones, Tutín Beras Goico y el suscrito.) sugerimos a Freddy, en disímiles ocasiones, dejar un testamento; pero él siempre nos decía: todo lo mío está claro, la mitad es de Pilar (de los bienes adquiridos durante su matrimonio) y la otra parte es de mis hijos.

La experiencia nos ha enseñado que sobre los bienes heredados los conflictos son más frecuentes que lo que se desearía.

En momentos en los cuales necesitamos recordar al "Gordo" con todo el cariño cosechado, la admiración señalada y la labor realizada; es penoso ver a sus descendientes debatir su pequeña o gran fortuna.

Por supuesto que este escritor y artista prefiere no tomar partido en esta disputa. Nadie debe hacerlo puesto que los tribunales, repito que lamentablemente, ya fueron apoderados.

A mí, particularmente a mí, me gusta mucho la máxima entre abogados de que "el mejor pleito es el que no se libra, es el que se negocia."

Ojalá que la memoria de Freddy y todos los recuerdos de sus acciones procurando un mejor país, todavía ilumine las mentes de sus descendientes y que el conflicto aún pueda llegar a la mesa de negociación. Hacer un último esfuerzo en este derrotero es plausible y Freddy, en su tumba, bien lo merece. De no, sepan todos, podría ser que él se sacuda en ella por los siglos de los siglos.

No sé quién, pero alguien debe mediar en todo esto. Yo no podría. Es tanto el dolor que siento ante esta noticia, que no podría participar en todo esto. Ni, siquiera, creo que los involucrados prefieran tal mediación. El sentimiento me compromete demasiado.

Me he atrevido, por esta única ocasión, a plantear abiertamente este asunto, dada la publicación que hizo Acento del caso que nos ocupa. Pero no volveré a intervenir. Nadie, si no es para tratar de lograr un salida negociada, debe meter cuchara en todo esto. Que a nadie se le ocurra tirar anzuelo en las aguas tumultuosas que ahora rodean esa inmensa y soleada isla que fue Freddy Beras Goico. Porque si eso ocurriera, entonces, este fiero guerrero del Arte y la Literatura, sacaría sus mejores y armas e iría a combatir por el honor del amigo que ha partido y que jamás —¡jamás!— debe ser mancillado.

¡Telón!

miércoles, 10 de julio de 2013

Cuatro telegramas culturales y dos poemas... de otros.

De vez en cuando tengo algunos resabios. No pocos amigos y familiares dirán que es un poquito más que "de vez en cuando". Comparto hoy con ustedes cuatro telegramas culturales y dos poemas urgentes que suelo releer con determinada fruición y hasta enfermiza pasión cultural.


TELEGRAMA UNO:

Intento cada día que nadie lea desde mi muro nada que tenga que ver con política. Y aunque reviso, para borrar y evitarles de esa manera que estén conminado a leer más disparates, algunos comentarios se cuelan. Te presento disculpas por esos inevitables deslices. Aclaro que no estoy fastidiado de la Política, sino de los políticos  Bueno... también me fastidian los incultos, los que escriben mal en las Redes Sociales, los monotemáticos, los que no gustan del Arte, los que no gustan de la poesía, los que no ven Teatro, los que no respaldan el Cine de calidad, los que no ríen, los que nunca participan de la bohemia, los que prefieren una sola lectura, los religiosos que menosprecian a aquellos que no están de acuerdo con sus opiniones, los que acosan a hombres y mujeres, los sobornadores y sobornados, los que nunca han leído a Tolstoi y a Camus, los intolerantes, los que se atreven a decir que Cohelo es buen escritor, los que "deslizan" aquí en estos medios publicaciones pornos o casi pornos, los que escriben sandeces, los resentidos y los pervertidos. Admito que estoy hablando de millones de personas en mi país. Ellos son culpables por fastidiarme. La ignorancia, el malquerer, la maldad y el mal gusto a nadie convierte en inocente; torna a la gente culpable para siempre. ¿Acaso he fastidiado a alguien con esto que he escrito?

TELEGRAMA DOS:

Siento que los escritores, artistas e intelectuales estamos ganando la guerra en las llamadas Redes Sociales. Las inundamos ahora de sabiduría. La Ignorancia, aunque no muere, se está desplegando, al menos en todos nuestros muros. Ojalá eso llegue a todos nuestros mundos. Por supuesto que los políticos se nos opondrán y legislarán en contra de la guerra declara por nosotros a la Ignorancia. ¡Poetas, escritores y artistas del mundo... uníos!
TELEGRAMA TRES:
Con la avasallante participación en Facebook y Twitter de poetas, artistas e intelectuales se ha demostrado que el talento y la sabiduría siempre han estado disponibles. Lo que hacía falta era un espacio libre y oportuno para mostrarlos. También se ha comprobado que los medios de comunicación no tienen mucho espacio, o ninguno, para la Cultura y el Conocimiento.
TELEGRAMA CUATRO:

¡La consigna es: guerra abierta a la Ignorancia... y a los ignorantes!
POEMAS URGENTES:
Concluyo esta entrega con dos poemas urgentes. Uno de Tony Raful ("Suicida") y otro de Safo de Lesbos ("Oda a la amada"). 


Suicida
Fue puntual a la cita de aquella noche,
atrás dejó los pájaros,
las flores,
los amantes
las últimas noticias,
el llanto,
la piedad del sueño.
Una mordedura sombría
de luna en suspenso
y un manso vacío de aguas
fueron su epitafio de luz y misterio
lo que no consignaron
las comisarías,
los médicos legistas,
las notas luctuosas,
los rezos,
toda esa burocracia de la muerte.


Oda a la amada
Igual parece a los eternos Dioses 

quien logra verse frente a ti sentado. 
¡Feliz si goza tu palabra suave, 
suave tu risa! 


A mí en el pecho el corazón se oprime 
sólo en mirarte; ni la voz acierta 
de mi garganta a prorrumpir, y rota 
calla la lengua. 

Fuego sutil dentro de mi cuerpo todo 
presto discurre; los inciertos ojos 
vagan sin rumbo; los oídos hacen 
ronco zumbido. 

Cúbrome toda de sudor helado; 
pálida quedo cual marchita yerba; 
y ya sin fuerzas, sin aliento, inerte, 
muerta parezco. 


Luego de estos dos poemas... ¿qué puede decirles este simple mortal? Sólo se me ocurre: ¡Telón!


martes, 9 de julio de 2013

Tony Raful: ¡Formidable conferencia de Giovanny Cruz!


"Por el misterio de la rosa, que prodiga el color y que no lo ve..." dice un verso de Borges en su "Otro poema de los dones", que nunca puedo dejar de aplaudir. 
Hoy, el inmejorable poeta Tony Raful me ha distinguido con un artículo que ha publicado en el Listín Diario.
Estaba haciendo en mi casa las labores codianas dada mi condición de artista: leer, escribir, reflexionar, publicar, corregir, botar los textos que no sirven, diseñar y cocinar.
Así las cosas, leí tarde, a la 1:30 pm, la entrega de hoy de mi entrañable hermano y gran intelectual Tony Raful. 
Siento ser un tanto raro: a veces pasional, a veces frío. Generalmente me dan un pito las críticas adversas y soy cauto, muy cauto, con las alabanzas (por aquello de que "el hombre acaricia el caballo para montarlo" y porque he comprendio que el único éxito de un escritor, apenas dura el minuto que transcurre una vez terminada su más reciente creación). Pero en esta ocasión, sin embargo, voy a confesar, sólo a los amigos, que Tony logró conmocionarme... mucho. Con algo del natural rubor que la circunstancia determina, os dejo la entrega de Raful en el Listín Diario, la cual siento un tanto inmerecida.

¡Formidable conferencia de Giovanny Cruz!

http://www.listin.com.do/puntos-de-vista/2013/7/8/283762/Formidable-conferencia-de-Giovanny-Cruz

Tony Raful

Giovanny Cruz es un artista, un trashumante de capa y espada, por su mente cruzan veloces todos los artificios de la imaginación creadora. Amante del buen teatro, de la buena música, de la gran poesía, cultor de todas las utopías, siempre ofrece  su hombro solidario para llevarlas a buen destino o alcanzar en algún recodo del camino, la ígnea flor violácea de todos los oprimidos.

Discurseador, polemista, humorista, bailador de bachata y son; ríe a carcajadas y suele reírse  de sí mismo, enamorado pertinaz de una belleza saltarina o de una cortesana primorosa. Tiene amanecidas contadas frente al mar, haciendo que el alba llegue en los ojos y en la piel de una mujer. Es oráculo y hechicero, tiene las pócimas de los aquelarres, pavimenta los sueños, convoca veladas, apela a los duendes, cruza los brazos, hace gestos extraños como poseído por algún aura mágica, y despide a los demonios. Es cocinero de estirpe. Hay que dejarle las noches culinarias para los platos más exquisitos, las combinaciones más sorprendentes.



Es actor de calidad, uno de los más  importantes dramaturgos de nuestra historia teatral. Es cuentista, narrador, escritor, difusor cultural, tiene la página digital cultural más completa de la nación. Lee con fruición a Borges y ama a Camus. El poema de los dones lo recita ensimismado. Para enamorarse, no deja de llevar en su mochila de seductor los versos de amor de Paul Eluard.
Hace algunos años abordábamos la figura augusta del patricio. No lo convencía del todo el Padre de la Patria. Cuestionaba algunas ausencias en momentos decisivos. No lograba aquilatar la reciedumbre  de gladiador de Duarte. Se le debilitaba la imagen procera cuando más requería de su entorno viril. Se le alejaba en el exilio cuando más lo necesitaba desandando cordilleras o ensenadas. Eran  discusiones interminables. No podía morir tranquilamente. Debió inmolarse en el Cercado. O ser fusilado  por el déspota Santana. O caer en un caballo blanco cruzando las líneas del enemigo, arma en ristre como Martí en Dos Ríos. Los héroes no pueden envejecer, decía Giovanny. Hay una estela dimensional en  la historia y en las estrellas que signa su tragedia y su gloria.
Giovanny acaba de escribir y pronunciar una  conferencia magistral, decidió investigar y conocer de primera mano la historia del teatro dominicano en el ciclo de la independencia nacional, en las luchas nacionales por la cristalización de una Patria soberana. Y se encontró de frente con Duarte y se percató que a Duarte corresponde, el primer uso dado al teatro en nuestro continente, como un arma política y revolucionaria. Y observó que luego de fundar La Trinitaria en 1838, creó la Sociedad Filantrópica, cuyo fin real fue adoctrinar y propagar las ideas nacionalistas. Giovanny reseña la labor de Duarte, como apuntador y mentor de las realizaciones teatrales de “La Dramática”. Integró a los trinitarios a la representación de la obras para crear conciencia patriótica entre el pueblo.



Duarte, apunta Giovanny, tuvo la experiencia en su estadía en Europa de ver la reacción de los espectadores ante las manifestaciones, acciones, parlamentos y argumentos, que importantes teatreros comprometidos con las causas libertarias presentaban en diferentes escenarios. Giovanny aporta como un dato esencial la participación de actores venezolanos contratados por los trinitarios para darle calidad y profesionalidad escénica a las representaciones, José Ferrer y Cecilia Baranis.
Fue así como se representaron piezas teatrales como “Bruto o Roma libre”, del conde Vittorio Alfieri. La trama de esta tragedia clásica, versificada en cinco actos, ocurre en el foro romano, en el cual Bruto inflama cada aclamación: “Libertad o muerte/no os queda otra elección”. Así también  presentaron, “Un día del año 1823 en Cádiz”, donde se difundía  consignas  e ideas que promovían la lucha por la libertad.



La Sociedad Dramática presentó también “La Viuda de Padilla”, de corte libertaria, insuflada en la sublevación en procura de las libertades de Castilla, en el contexto de las Cortes de Cádiz de 1813, inspirada en Doña María, viuda de Padilla, que prefirió la muerte a la sumisión. Giovanny recalca la del criterio, de que, casi todos los procesos independentistas de América, fueron decididos y planificados proyectos masónicos, y por lo tanto, liberales y avanzados. Realza la figura de Duarte, su visión histórica, su aporte social, cultural y humano. Se declara un hombre agradecido por el sacrificio de Duarte, sus trinitarios, sus filantrópicos y sus dramáticos.




Gran aporte de Giovanny a la historia cultural del teatro dominicano y a la lucha por la libertad. Gran reencuentro con Duarte en los linderos de la gloria.

¡Peter El Rojo, Carlos Espinal y Franz Kafka!


 ¡Peter El Rojo, Carlos Espinal y Franz Kafka!



Confesiones a una academia”. Esta pieza, como perfecta obra kafkiana, nos muestra su típico pesimismo irónico. Su originalidad antológica y el inmenso valor literario de sus obras, han otorgado a Franz Kafka un sitial privilegiado, casi mítico, en la Literatura de nuestros tiempos. El crítico y teórico literario estadounidense Harold Bloom, escribió sobre Kafka: 
«Desde una perspectiva puramente literaria, ésta es la época de Kafka, más incluso que la de Freud. Freud, siguiendo furtivamente a Shakespeare, nos ofreció el mapa de nuestra mente; Kafka nos insinuó que no esperáramos utilizarlo para salvarnos, ni siquiera de nosotros mismos».
La historia en cuestión trata de un mono que se convirtió en humano. Fue encontrado en una cacería en la Costa del Oro africana. Dispararon y el único que resultó herido es un gorila al que después nombrarán como Peter el Rojo. Logra sobrevivir y luego despierta en una jaula de un barco. Al verlo, los expedicionarios, tan tranquilo, concluyen que servirá muy bien para el adiestramiento. Pasa algún tiempo realizando acciones intrascendentes antes de darse cuenta de que está atrapado y que no tiene futuro. En ese momento descubre que necesita cambiar de vida y estrategia para sobrevivir. Algo que no iba a lograr siendo un mono de circo. Decide, entonces, convertirse en ser humano.

Tengo referencias de muchas puestas en escena del cuento monologado “Confesiones a una academia” o “Peter El Rojo”; de Kafka (en mis obras completas de Kafka citan al relato como Informe a una academia). Les aseguro, no obstante, que una de las más profundas, y desde luego, mejor llevada a escena, es la de Carlos Espinal, quien en ningún momento cae en la idiotez de tratar de imitar a un gorila. Algo que podría haber hecho fácil su actuación (suelo decir que interpretar prostitutas, locos y monos es algo muy simple para un actor). 


En este caso el asunto es que el único personaje de la obra se ha entrenado para dejar la selva, por lo tanto una de sus luchas en el escenario es tratar de no ser un salvaje. Sin embargo, tal condición aflorará... inevitablemente.
 
Esa otra "lucha" da un tremendo grado de dificultad a la interpretación de Carlos Espinal, del cual sale airoso. 


A mí me recuerdan, Kafka y Carlos, la lucha de la Raza Humana por querer alejarse de sus naturales instintos animales. Ese es el camino que, a mi humilde parecer, explora el magnífico Carlos Espinal en este montaje. Además, el actor-director de esta intensa versión, explora y aporta con brillantez el tema del Inmigrante. 



Aquí Kafka y Carlos parecen contarnos la crónica de nuestros devenires en este planeta al que tendemos, reiteradamente, en llamar... nuestro. Somos inmigrantes en el asfalto y en los rascacielos. Nuestro hogar natural es la selva. ¡Ahí están todos nuestros instintos, ecos y orígenes! 

Así las cosas, Peter El Rojo eres tú... y yo también, intentando ambos nunca “regresar”, o dejar escapar, ni aún transitando por nuestros laberintos interiores, al animal que nos habita.

En este tenor, el aporte visual que hace esta escenificación es de antología, en un escenario que está condicionado a una conferencia dictada en una importante academia mundial.

Esta es otra dificultad que hace aún más complejo e interesante esta propuesta escénica. Por supuesto que Espinal aquí se monta en Kafka para contarnos su particular Historia. Esto, porque Carlos es un inmigrante, cuyas añoranzas, cultura y amores se encuentran, exactamente, en el corazón de nuestra mitad de Isla, a la que, como su Peter El Rojo, ha tenido que dejar; pero cuyo instinto atávico lo obliga a volver... de vez en cuando.

Resulta, pues, que “Confesiones a una academia” o “Peter El Rojo” es lo que indica el título: una conferencia; pero al mismo tiempo es una pieza de Teatro. Un actor del nivel del Carlos Espinal bien podría haber puesto miles de recursos, inventos y payasadas a la teatralización. Empero, eso hubiese sido como traicionar a la imposición que nos plantea el texto. Solemos decir en el Teatro que un actor es un esclavo en libertad, un individuo que puede moverse "libremente" sobre las tablas de un escenario; pero que nunca puede romper aquellas cadenas que les atan: texto, las líneas internas y externas del personaje, la caracterización física y psicológica que el autor plantea, su cultura y las condiciones dadas.



Carlos, aunque obviamente no es un simple lector teatral de Kafka sino su socio, opta por el trabajo serio... y triunfa. Uno ve en el escenario de Espinal esa otra “lucha” del actor por desplazar en el espacio a su personaje y constantemente regresar a la esencia teatral de la propuesta. Como ese Sísifo que nos explica tan bien a todos los hacedores de Teatro del mundo, que tiene que llevar la piedra hasta la cima y una vez allí ésta se devuelve y Sísifo tendrá, entonces, que regresar a buscarla y subirla una y otra vez... irremediablemente. 

Eso es lo que Carlos Espinal hace en escena con su actuación en la obra que ocupa mi atención, con inteligente vestuario kafkiano, con muy buena iluminación, adecuada escenografía y una magnífica banda sonora; recientemente presentada en la Sala Ravelo del Teatro nacional y que pronto, según me he informado, volverá a escena. ¡Muy bien! 

Salí de la sala sumamente complacido. Hubiera preferido que nunca hubiesen tirado el... ¡Telón!