sábado, 12 de mayo de 2018

Besos robados por Junot y Olimpo Cárdenas


Besos robados por Junot y Olimpo Cárdenas
Por Giovanny Cruz Durán.

A mi amigo Basilio Belliard que pidió mi sencilla opinión sobre este asunto.



Creo que saben que no soy exactamente fan de Junot Díaz. Sin embargo, reconozco que ha logrado mercadearse y colocarse muy bien en los renglones literarios y académicos. Bien por él.  Precisamente, su posición en el mercado del libro tiene bastante que ver con las acusaciones que, 20 años después, le están haciendo de acoso… ¡por haber, supuestamente, intentado robarse besos! 

El movimiento feminista que invita a quienes han sido abusados a manifestarse públicamente, inicialmente fue trascendente; pero, y lo advertí entre muchos amigos, se presta a que por diferentes deleznables motivos, hombres y mujeres hagan denuncias infundadas o exageradas. Ha estado ocurriendo. Y eso desprestigia, precisamente, al mismo movimiento. 

En el caso de Junot, me parece que ha sido una encerrona, meticulosamente planificada, para proyectar a algunas y beneficiar a otras. Es una soberbia zoquetada salir -¡20 años después!- a denunciar el robo de un beso. 

Estoy seguro que muchos de ustedes habrán robado besos por ahí. Y a muchos otros y otras les han robado unos cuantos.

El caso es, que cualquier novio y novia resentidos, con el fin de dañar u obtener beneficios, puede acusar a otra u otro de acoso. Lo que también constituye acoso.

Probablemente esta nueva moda de notoriedad gringa no durará mucho; pero, mientras la guadaña va y viene, muchas reputaciones habrán caído. Se puso de moda durante bastante tiempo ir al siquiatra. No era un gran artista aquel que no tuviese un caro loquero disponible. Artistas que tenían un gran problema para cualquier sencilla solución. Después, fue andar para toda parte con un perro. La tendencia actual que nos llega de los USA es la denuncia por acoso. ¡O denuncias o no estás en nada! 

Ante las todavía pocas evidencias que he podido reunir en el caso de Junot, que ya ha maltratado su prestigio, aclaro no se trató de algo relevante. ¡Se trató de un beso! No es que el escritor la tiró en el piso, la arrebató la ropa y luego la penetró a la fuerza. Nada de eso. ¡Fue un beso!

Me he robado algunos y a mí algunas que otras féminas me han hurtado otros. ¡Se trata de un beso robado, tal como antes hizo y cantó Olimpo Cárdenas! 

¡Anda pal carajo!

"Besos robados"; de Olimpo Cárdenas:
https://www.youtube.com/watch?v=EiZfQ0k5tbA