lunes, 12 de abril de 2010

Tres opiniones sobre El Talía


Varías personas me han enviado su opinión en torno a mi artículo sobre las intenciones del Ministerio de Cultura de querer revivir el premio El Talía de Plata. Les recuerdo a los pasionarios que estamos absolutamente en desacuerdo con dicha idea porque juzgamos que no debe destinarse recursos a eso que tildamos de... "capricho". También planteamos en el publicado artículo, que el premio de marras solamente traeria separación y chismes entre los teatreros dominicanos.
En un párrafo del citado artículo decía: "Quiero declarar, públicamente, que me opongo con toda las fuerzas interiores que me quedan a la constitución de un premio que, como todos, siempre será sectario, innecesario, contraproducente, superfluo, injusto y divisionista."

Concluía el trabajo de manera premonitoria: "Visualizo hoy el problema que vendrá en el futuro si persisten con el Talía. Lo digo yo... y dicen por ahí que soy bastante brujo. ¡Gracias a la misericordia!"

El joven actor Raeldo López emitió una interesante y bien argumentada opinión que nos hubiese gustado incluir en el trabajo de hoy, para que géneros y generaciones estuvieran representados dentro de él; sin embargo, sin querer borramos el trabajo de Raeldo enviado por Internet. Lo que puedo asegurarle es que tampoco favore la creación del premio ese. Decía conocer mis actitudes de médium y pedía una mejor política oficial que asegure mayor afluencia de espectadores en las Salas de Teatro y... el chequesito de rigor luego de concluir las representaciones.

Pero veamos tres de la tantas opiniones recibidas al respecto. Tratamos de ser amplio y democrático; empero, ninguna de las opiniones hasta ahora emitidas fueron favorables al discutido proyecto de El Talía. Si llegase una que lo defienda la publicaremos, siempre y cuando esté bien escrita. ¡Los iletrados aquí no pasarán!

La opinión de Aídita Selman 
En mi humilde opinión, los teatristas no debemos luchar por "otro" premio, (que inevitablemente por un buen tiempo será "el otro"), sino, como prioridad, ocuparnos de la situación de baja que está afectando nuestro arte, con salas vacías, fracasos económicos y poco apoyo privado o estatal a la actividad de hacer arte. Opino que los artistas debemos concentrarnos en rescatar el arte y luego vendrán los premios como consecuencia. Ciertamente el compañero Giovanny Cruz acierta en prever que un premio en estos momentos desuniría. Primero reforcemos el gremio, fortalezcamos el oficio, invirtamos en el propio teatro y cuando alcancemos la estabilidad, entonces pensemos en premios. Necesitamos con urgencia el premio de una sala llena, de un público apoyándonos, de un patrocinio permanente y organizado, de una seguridad para el productor o director que hace la inversión arriesgando el cuello y para el artista que no sabe si mañana podrá ir al supermercado. No es favorable que un premio nazca en un ambiente de inseguridad entre sus beneficiarios. Primeros aseguremos el teatro y el oficio del teatrista. Analicemos los fenómenos que afectan la industria teatral, gestionemos las soluciones y después celebremos. 
Con aprecio y admiración a los héroes que mantienen vivo el teatro.

La opinión de Manuel Herrera
Totalmente de acuerdo contigo, Giovanny. Aunque acabo de recibir tres nominaciones para los AUDIE, que son los premios de la industria de los Audiolibros, equivalentes a un Grammy. Pienso que si ganara no me beneficiaría en nada ya que lo que me mantiene en el mercado es la plataforma de calidad que hemos logrado en todos estos años.



 La opinión de Iván García
Inteligentes deducciones, mi amigo. Estoy de acuerdo contigo, y voy mas lejos, me parece: que no creo en ningún premio de ninguna parte, porque en ellos siempre intervienen las opiniones (casi siempre interesadas) y los grados de asimilación cultural (que va desde casi plena hasta totalmente ausente). Una prueba son los "Academy Award" de Hollywood (conformada por los miembros del clan), en cuyo nombre tantos crímenes han sido cometidos. Con la intención de mejorar la situación fue creado el "Golden Globe"; pero, que va, ya hace tiempo que les va siguiendo los pasos a su antecesor...
El asunto es... que al ser humano le gusta ser premiado por lo que hace (bien o mal), sobre todo en países como el nuestro, en los cuales, como decía el gran Padre del Postumismo, don Moreno Jiménez, el que no anuncia no vende. Y también en el arte clásico y sus sucedáneos la publicidad es necesaria para poder vender... Bien; para no alargar demasiado el asunto me parece que tenemos que disponernos a crear "el agua tibia" si queremos que nuestra profesión, no los individuos, llame la atención de los tibios y, ademas, reconozca, aunque de manera imperfecta, la calidad de sus grandes...