jueves, 26 de noviembre de 2009

Un café frío...





Me he dado cuenta que hay mucha gente pendiente de mi y de lo que hago o planifico hacer. Hace unas dos semanas alguien me preguntó: ¿Qué estás tramando ahora? En mi mágico diciembre siempre me hacen preguntas de este tipo.

Hace una semana, estando trabajando en una minic omputadora que me regaló me casi hermano Cuchy Elías, en el Boga-Boga dos amigos comenzaron a investigarme solamente entre miradas. Cuando no pudieron más, uno de ellos preguntó, mientras el otro trataba de leer lo que escribía: ¿Contra qué o quién estás conspirando?

Otro amigo me escribió un mail para cerciorarse, aparentemente, de que lo invitaría a la próxima lectura de mi nueva pieza teatral. Lo que creo que realmente deseaba era saber en cuál proyecto me estaba ya involucrando. ¡La curiosidad, la curiosidad!

Supe que hay varios colegas nerviosos porque aún no suelto prendas sobre el destino final de los pasos que estoy dando.

Más de diez actores dominicanos se me han puesto, "desinteresadamente", a la "orden para cualquier cosa". Desde luego siempre intentan averiguar, precisamente, ¿cuál cosa?

Uno no pudo más con sus nervios y me llamó ayer por teléfono para inquerir: ¿Voy a estar en tu nuevo proyecto teatral? Soy un poco nervioso y la angustia me está matando.

He escuchado insistentes rumores que aseguran que ya estoy cobrando como Director del Teatro de Bellas Artes. Esto lo he negado reiteradamente. He aclarado que nadie se me ha acercado para proponerme algo. Y que solamente aceptaría si me dejasen ejecutar libremente mis ideas, por aquello de que nunca me han servido los zapatos de otros. Francamente dudo que lo hagan. (Mi esposa y actriz Giamilka debe estar complacida, porque al menos esta vez no dije: ¡No me interesa carajo! Aunque esa es la verdadera línea interna.)

Pero a pesar de mis desmentidos los rumores persisten: "Se ha reunido seis veces con Lantigua"/ "Iván García y él ya tienen todo armado. Por eso fue que él lo defendió tanto de Clarisa Paulino"/ "Franklin Dominguez lo invitó a planificar todo en una casa que tiene en Constanza."/ "Rafael Villalona lo está ayudando a hacer una selcción de obras."/ "Le pagarán 350 mil pesos mensuales." (¡Cuánto cuarto!)

Simples zoquetadas que me recuerdan cuando me acusaron, al salir de la Secretaría de de Cultura, de haber comprado un Porshe de cajeta. Algo que en parte era cierto. Le di dinero a mis hijas para comprarme un regalo de cumpleaños. Y efectivamente me compraron un Porshe negro... de seis pulgadas, que vino en una caja. Fue para lo único que dio lo que pude sustraer en la administración pública.

El hecho de que en los asuntos políticos estoy en perfil muy bajo, tiene a mucha gente nerviosa y asegurando que mi nombramiento como funcionario en el gobierno ya está hasta firmado. Como afirmaron que una vez, junto a Karina Noble y Giamilka Román, me le tiré al Presidente en su despacho. ¿Y es fácil?

Hasta me colocaron como cabeza de una comité de empleos culturales del gobierno. ¡Vaya usted a ver! ¿Y yo soy agencia?

Voy a aclarar los misterios: En lo que estoy, después que escribí y leí públicamente me pieza "Rebelión y Suplicio de Antígonamota", es armando el proyecto de llevar al cine "Amanda". Tengo el guión preparado. Fiora Cruz Carretero (Clon físico de Carlota) y una conocida profesora de guión argentina (por el asunto de las trapisondas no diré por ahora su nombre) lo han revisado varias veces. Seguramente lo harán cien veces más. (Ya Karina y Giamilka lo leyeron. ¡Sé de gente que acaba de ponerse rojita por la envidia!)

También estoy ya preparando estudios sicológicos y bocetos para vestuario, luces, escenografía y actores de mi nueva pieza teatral, la que llevaré a escena con la anuencia de Dios y Catana, en marzo. Hablo de "Un café frío en la calle El Conde".

REPARTO:

                 Personajes obra:


                                           Alicia (Reportera de TV)

                                           José Alberto (Cajero de un Banco)

                                           Colasa (Vendedora de Café)

                                          Alcibíades (Diputado por Bonao)



                 Personajes en Televisión:

                                          Señor Boca

                                          La Esposa

                                          La Mamá

                                         Presidente Diputados

                                         El Gerente

                                         Mayor Pérez Cruz


Para demostrar que estoy diciendo la verdad les envío fragmentos de la pieza teatral:

JOSÉ ALBERTO: ¡Buenos días, Colasa! Desde tempranito en la faena ¿verdad?

COLASA: Unjú.

JOSÉ ALBERTO: ¿Ya tiene café?
 

COLASA: (MAL HUMORADA.) ¡No! Aguacate, tostones, camarones, langosta, pollo guisado, chuletas de cerdo asadas, filete de res horneado, chivo frito, vino, pasajes de avión, gasolina y seis bicicletas.

JOSÉ ALBERTO: (TURBADO.) Lo que yo quería saber... (IRÓNICO.) Siempre usted de tan buen humor, Colasa. (TRANSICIÓN.) ¡Deme un vasito, por favor!

COLASA: Imagino que lleno de café.

JOSÉ ALBERTO: Desde luego.


Otro fragmento:



VOZ DEL SEÑOR BOCA: Adelante, Alicia continúa con ese interesante reportaje.

ALICIA: (EN TELEVISIÓN.) ¿Cree usted en Dios?

JOSÉ ALBERTO: ¡Pero esa es usted!

JOSÉ ALBERTO: (EN TELEVISIÓN.) No.

JOSÉ ALBERTO: ¡Ese soy yo!

JOSÉ ALBERTO: (EN TELEVISIÓN.) Ni en Dios ni en nuestras leyes.

JOSÉ ALBERTO. ¡Oiga! Yo no dije... (ALICIA HA DESPARECIDO.) ¿A dónde se fue? ¡Colasa!

COLASA: Yo no hablo con ateos.

ALICIA: ( EN TELEVISIÓN FRENTE A LA UNIDAD MÓVIL.) Este señor, cajero de un Banco, se dice llamar...

JOSÉ ALBERTO: (EN TELEVISIÓN.) José Alberto Evangelista.

ALICIA: (EN TELEVISIÓN.) ¿Es usted comunista?

JOSÉ ALBERTO: (EN TELEVISIÓN.) Ajá. Soy zurdo.

JOSÉ ALBERTO: Pero mire... no fue así el asunto... ella me preguntó...

COLASA: ¡Comunista, ateo!


Último fragmento:

ALICIA: Nuestras cámaras han llegado ahora hasta la pieza donde vive José Alberto. Veamos qué nos cuenta la esposa de este peligroso individuo. Adelante estudio.

ESPOSA: (EN TELEVISIÓN. ESTÁ METIENDO ROPA EN UNA MALETA.) ¡Yo me voy! No quiero saber nada de ese hombre. Mi mamá y yo nunca hemos estado seguro de que sea realmente un hombre. Él tiene una vaina rara con su jefe en el Banco. Me regreso ahora mismo a Santiago a la casa de mi madre. Esto me pasó por no hacerle caso. Pero mañana mismo le pongo el divorcio a José Alberto. Yo sé muchas cosas de ese hombre. Y voy a dar ahora mismo un terrible y definitivo testimonio de él: en la casa vive tirándose muchísimo pedo. ¡Ese asqueroso!

JOSÉ ALBERTO: ¡Esa desgraciada! ¡Maldita mantenida que eruta en cada cucharada de comida que se come! Ella era una becada en mi propia casa. Lo único que hacía era chismear todos los días por teléfono con su madre; que todo el mundo sabe lo que fue en los Pepines de Santiago. Oigan cómo era que le decían: veinte y algo más. Mi mujer nunca quiso dar un golpe...

ALICIA: ¡Imaginen el valor de esa mujer resistiendo la propuesta del marido para que se involucrara en un golpe... de Estado!

JOSÉ ALBERTO: ¡Deje ya, carajo, de hablar disparates! Yo hablaba de otro golpe.

ALICIA: ¿De otro golpe? ¿Pretendía usted, acaso, asaltar su propio Banco?

JOSÉ ALBERTO: ¡Qué Banco del diablo!



Lo que aún no voy a decir son los nombres de los actores y actrices que interpretarán los personajes de la pieza. (¡Cuanta gente nerviosa!)

Tengo que pedir prestado el estudio de Basanta para realizar las escenas de TV. Y hasta editar en su compañía. Gratis, naturalmente. Le adelanto a Basanta que quiero buenas atenciones para todo mi personal. Hay uno de ellos que es vegetariano. Ninguno de nosotros toma vinos mediocres.

Una pregunta seguramente se están haciendo los Pasionarios: ¿Era necesario contar tantos chismes para iniciar la publicidad de una obra teatral? Quizás no. Pero ciertamente... nuestra terrible y masiva maquinaria de propaganda ya está rodando.