lunes, 14 de octubre de 2024

¡El Cemí de Algodón regresa a su patria!

Por Giovanny Cruz Durán.

 

La ministra de cultura dominicana y su par en Italia firman acta de
entendimiento para que el cemí regrese al país


Nuestro cemí de algodón es una pieza única que salió del país a finales del siglo IXX y jamás ha regresado, a la que no pocos califican como nuestro particular Tutankamón. Este escritor e investigador cultural la califica como el más trascendente y valioso tesoro antropológico de las Antillas.  

Su partida de nuestro territorio siempre ha estado rodeada de misterios y conjeturas; que en este momento no tendría ningún sentido refrescar. La leyenda cuenta que fue encontrado por un campesino en las cuevas del Pomier, provincia San Cristóbal.  El periódico Corrierre della Sera, de Italia reseña que el cemí fue comprado por Giovanni Battista Cambiaso en 1882, y luego enviado a familiares en Génova. Ahí empezó un periplo inigualable. Destaco que el museo, al que luego sería donado, la registró como una pieza centroamericana. 


El primero en hablar del cemí  en cuestión, a nivel internacional, habría sido el antropólogo estadounidense Jesse Walter Fewks, quien en 1891 anunciaba su descubrimiento adjuntando un dibujo de un tal capitán Appleton, de Boston, en el que se representan dos cemíes (el de algodón y uno de madera)

En 1892, el pintor Rudolf Cronau visitó la isla y dibujó con detalles el cemí. Pero en 1903, cuando Fewks vino al país, ya el cemí no se encontraba aquí.

En el año 1999, en un encuentro del intelectual Tony Raful y yo, ante la inminencia del triunfo de Hipólito Mejía, juramos hacer todo lo posible por regresar el cemí de algodón a nuestra isla. Una vez juramentados Tony y yo como funcionarios de la Secretaría de Estado de Cultura, iniciamos las gestiones para recuperar el cemí de algodón. 

Dado que la pieza no salió del país en calidad de hurto y estando por donación legítima en un museo de Turín, las gestiones, aunque tesoneras, no dieron con el propósito añorado. Luego, me consta, gestiones similares encaminaron los exministros José Rafael Lantigua y José Antonio Rodríguez. Pero infructuosos resultaron sus esfuerzos.

Al llegar Luis Abinader a la presidencia de la República y ser Tony Raful designado como embajador extraordinario y plenipotenciario en Italia, éste retomó inmediatamente el viejo plan de recuperar al cemí. Aunque muchos llegamos a sentir que nunca podríamos recuperar la valiosa pieza antropológica, Raful nunca se dio por vencido. Y salvando obstáculos legales y protocolares nacionales e internacionales siguió con su lucha. En ese tenor, dio un significativo paso de avance cuando firmó un protocolo de intención con la Universidad de Turín, dueña del museo en el cual nuestro cemí es la pieza principal.

Pero no crean que luego de este acuerdo todo ya estaba resuelto. No. Tony, al que nadie logró apartarlo de su objetivo, involucró a la ministra Milagros Germán y al director general de museos, Carlos Andújar. Nuevos pasos legales y protocolares.

Finalmente, en espera de todos los últimos detalles, comparto con ustedes que hoy se ha firmado, entre nuestro ministerio de Cultura y su símil en Italia, el acta de entendimiento mediante la cual nuestro cemí, que se supone tiene dentro el cráneo de un cacique, vendrá en el 2025 al Museo del Hombre Dominicano. Adelanto que ese será el acontecimiento de cultura más relevante en toda nuestra historia.

Aplausos y… abran el telón… No… abran todos nuestros telones.